Para mantener el calor
Me gustan las bufandas. De verdad, me encantan.
Ahora que parece que el frío llegó para quedarse, estos accesorios me ayudan a mantenerme abrigada sin necesidad de echarme mucha ropa encima. Todo lo que necesito para entrar en calor es una blusa de manga larga, y una bufanda. Creo que me gusta mantener mi cuello cubierto cuando hace frío.
Quiero compartirte unas bufandas que son, por decir lo menos, muy fáciles de hacer. Cuando digo fáciles, me refiero más bien a regaladas. ¡De verdad! Te lo dice alguien que en realidad no sabe tejer.
El año pasado, mientras trataba de hacer mis compras navideñas, encontré un maniquí en una tienda usando una bufanda rizada, muy bonita. En cuanto la vi, además de pensar en que me gustaba, me di cuenta que era muy fácil de hacer, incluso para mí. Así que traté de fijarme bien cómo estaba tejida. Por supuesto, no tomé nota ni me grabé los detalles, pero me dio gusto haber sido capaz de convertir el recuerdo en una bufanda rizada y bonita, sólo para mí.
Así se ve puesta:
Después de darme cuenta que sí pude tejerla, quise hacer otra para mi hija. Esta vez opté por el color rojo, para que la pueda llevar a la escuela.
Me gusta cómo se ve en la foto; parece una rosa roja. Al acabar la bufanda hice los pequeños corazones para las puntas. Un detalle divertido para una niña.
Se ve lindo, ¿no? (y también, muy fácil)
Me encanta ponérmela (de hecho, ¡la estoy usando ahora mismo!)
Lo que también es un hecho es que, como hice las bufandas el año pasado, no tengo fotos del proceso, ni tengo un tutorial para tejerlas. Todavía no conocía los blogs, y ¡no pensaba en tomar fotos de las cosas que hacía!
PERO, prometo decirte cómo las hice. Son tan sencillas que sólo necesito tiempo para recordar cómo las tejí y escribirlo. Es una promesa.
Así que, pronto tendré el tutorial. Mantente al pendiente. 😉
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