Estoy enamorada de esta pequeña oficina. Es chiquita, pero súper organizada e impecable. Adoro cómo el papel tapiz hace un ligero y muy atinado contraste con el escritorio blanco, y el hermoso color morado del tapete aterriza todo el espacio. Copiar el look en tu hogar u oficina es relativamente sencillo, especialmente si tienes la fortuna de tener un Ikea cerca. Acá en México no lo tenemos, así que la cosa se complica, pero sólo un poquito. 😉
Esta noche quisiera tener un espacio así de bonito para estar trabajando ahí. Hoy tengo mucho trabajo, y creo que no alcanzaré a terminarlo pronto, así que será una semana pesada… espero que no demasiado. =)
Besos, ¡y gracias por los comentarios! Los de la entrada de ayer, del naranja y negro fueron muy divertidos. ¿Por qué será que en general el naranja nos cuesta tanto?
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